Primero escucharon al perro ladrar, luego a una mujer llorando

Robert Serra, padre del diputado del PSUV, se enteró de la noticia varias horas después, por la llamada de un hermano. Trabaja como supervisor de ventas y la noche del crimen durmió en Charallave, pues realizaba recorridos por la zona. A las 6:30 le pasé un pin a Robert para informarle que no iba a dormir en la casa. Sé que leyó el mensaje, pero no me respondió.Desde temprano y hasta las 2:00 pm estuvo encargado de recibir en la casa a los funcionarios del Cicpc, Fiscalía y Sebin que adelantan las investigaciones.Cuando los funcionarios se retiraron, el hombre se tomó un tiempo para hablar de su hijo. Todavía no he asimilado la muerte de mi hijo. Era excelente hijo y persona. Él no tenía frenos en su trabajo y yo sabía que iba a seguir evolucionando.Desde pequeño Robert siempre decía que algún día iba a llegar a ser presidente. A él le indignaba la pobreza, por eso era fanático de ayudar a los pobres.Una de las bondades del joven era su capacidad para relacionarse: Siempre me impresionó que él entraba a la parte más radical del 23 de Enero. Robert le llegaba a la gente facilito.El diputado vivió siempre con su abuela paterna en Catia. Iba a cumplir dos años residenciado entre las esquinas de Nazareno a San Fernando de La Pastora en la vivienda número 120.Allí residía con su padre y con dos compañeras de trabajo, entre ellas, una joven que le llevaba la prensa y le ayudaba a organizar eventos.Él se vino a esta casa porque era más grande y además aquí realizaba reuniones para discutir temas de su circuito. María Herrera no era pareja de mi hijo. Ella...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR