¿Y por qué Carlos Zerpa?

I Es un hecho que casi todos los seres humanos sienten el impulso de crear, y que muchos tienen la habilidad de hacer cosas con las manos o de pensar en algo novedoso. Numerosos hechos históricos se dieron en la segunda mitad del siglo XX, entre ellos, nació el rock and roll, la perra Laika iba a bordo de la nave soviética Sputnik II, triunfaba la revolución cubana liderada por Fidel Castro. En nuestro país caía la dictadura de Marcos Pérez Jiménez y nacía, en la ciudad de Valencia, Carlos Zerpa.Esos primeros años en su ciu dad natal fueron determinantes en el imaginario del joven artista mi infancia fue feliz, fui un niño feliz, gracias a Dios. La radio encendida en su casa le otorgó una influencia polifónica a su obra que aún hoy se presiente, puedo escuchar a Edith Piaff, La Lupe, Mina, pero lo que en verdad me mata es el rock, sobre todo el de los finales de los sesenta y comienzos del setenta.II Durante la década del setenta Carlos Zerpa toma residencia por primera vez fuera del país, en Italia, para formarse en di seño y artes gráficas. Recuerdo cuando yo tenía entre dieciocho y veinte años, ya pintaba mucho, leía, escribía y escuchaba rock.Comencé a exponer mi obra en Salones y a hacer más individuales, me uní al grupo de arte Nueva visión, junto al escultor Alexis Mujica, luego me casé y me fui a Milán a estudiar al Instituto Politécnico de Diseño.La siguiente década en Vene zuela vino cargada de varias acciones colectivas y cambios sustanciales en la formalidad del arte en Venezuela. Zerpa, con una inagotable poética en su obra, a veces violenta, otra evocativa, irrumpe con una serie de performances que se deshacían del acto material, los presentaba en espacios públicos o privados. Decía el investigador Juan Carlos Palenzuela que en la obra de este artista se apreciaba una acumulación de objetos heterogéneos asombrosa. El hilo de unión lo constituye la nostalgia, la memoria, lo que tercamente el artista desea o insiste en salvar del desastre e indolencia de los hombres. Este artista estaba pues otorgando nuevas posibilidades discursivas a los materiales y objetos que incorporaba en sus ensamblajes, construyendo nichos de la memoria, altares de la provocación, vitrinas del imaginario latinoamericano.III Los ochenta. En Venezuela el viernes negro mostraría la cara de una política económi ca mal llevada. Y Carlos Zerpa formaría parte de dos importantes muestras internacionales...

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