Rafael Chamo Pérez y la rutina diaria

Rafael Pérez es siempre de los primeros en aparecer en el tabloncillo antes de los encuentros. Sólo necesita un balón y un compañero que le sirva de pasador después de cada lanzamiento. A veces lo hace con música, en otras no. Es una rutina que aprendió cuando estudiaba Criminalística en Puerto Rico. Desde entonces no la ha dejado. Asegura que lanza entre 300 y 400 pelotas antes de los encuentros. Confiesa que eso lo relaja mentalmente para el desafío. Eso me hace prepararme para el juego. Para entrar en calor tú no puedes llegar al juego media hora antes, porque el cuerpo no está preparado para el encuentro. Es una rutina a la que adapté a mi cuerpo y sin ella no puedo jugar, confesó el escolta de Guaiqueríes de Margarita. El Chamo, como se le cono ce, toma cada tiro en suspensión y no deja que ningún lugar de la mitad de la cancha se quede sin sus disparos. Se podría suponer agotamiento por tratarse de tantos tiros antes de los encuentros, pero es algo habitual en él. Te tienes que acostumbrar. Al principio sí te fatiga porque es una sobrecarga. Pero después te acostumbras y cuando dejas de hacerlo el cuerpo mismo te lo pide, comentó. El disparo es la principal ar ma ofensiva de Pérez y trata de cuidarla y mantenerla. Tanto así que le hace mantenimiento. Hay que pulirla. Cada movimiento es importante y no hay que descuidarlo. Pérez toma como referencia a otros exitosos...

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