El robo

El celular de Jairo Lizarazu asesinado en Soacha ya debe de estar en poder de otra persona, quien seguro lo compró en alguno de los centros de venta de móviles robados. Esa persona no debe saber que usa el teléfono de un muerto, el primero de 2014 a causa del delito del robo de celulares en Colombia. Esta industria registró el año pasado una macabra producción total de 907.107 equipos robados. Estas cifras son argumento para sostener que los múltiples planes contra el hurto de celulares han fracasado.Pese a los esfuerzos de los operadores, que construyeron entre todos una gran base de datos de Imei el número de identificación único de cada celular para registrar y bloquear los equipos robados; pese a los operativos policiales y el trabajo de la Fiscalía, o pese a los acuerdos transnacionales para cerrar las fronteras a los teléfonos hurtados...

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