Salida de Valenzuela no cambiará política de EE UU hacia la región

Arturo Valenzuela dejó el viernes el cargo de subsecretario de Estado de Estados Unidos para Asuntos Hemisféricos y con ello la responsabilidad de ser la mano derecha de Hillary Clinton en el manejo de la política exterior hacia América Latina y el Caribe. Expertos coinciden en que eso no significará cambios en la forma como Washington se relaciona con la región. La llegada de Barack Obama a la Presidencia, en 2009, generó expectativas en el continente sobre un mayor acercamiento Me guiaré por el principio de que lo bueno para las Américas será bueno para nosotros, dijo en mayo de 2008 el entonces candidato. Las esperanzas aumenta ron cuando el mandatario intervino en la V Cumbre de las Américas celebrada en abril de 2009 en Trinidad y Tobago. Valenzuela, chileno de 67 años y profesor de la Universidad de Georgetown, asumió el cargo en noviembre de 2009. Su trabajo se centró en en fatizar que países como Brasil y Chile son casos de éxito y tratar de cambiar la visión de que Latinoamérica necesita la ayuda de Estados Unidos. La cooperación con México ha sido notable; las relaciones con Brasil han mejorado con el gobierno de Dilma Rousseff. El problema es la incapacidad del Ejecutivo de profundizar en asuntos que requieren un capital político como los tratados de libre comercio o la reducción del tráfico de armas. Los problemas internos y la polarización en el país impiden mayores avances, expresó Cynthia Arnson, directora del programa América Latina del Centro Internacional Woodrow Wilson. El ex funcionario, que vol verá a la academia, visitó Suramérica con excepción de Venezuela. También estuvo en Centroamérica y el Caribe. Acompañó a Obama en su viaje a Brasil, Chile, México y El Salvador, y a Clinton en sus tres estancias en México y en Uruguay, Chile, Brasil, Costa Rica, Guatemala, Perú, Ecuador, Colombia y Barbados. Se le critica el no luchar por estrechar los lazos. Se pensaba que cambiaría el bajo perfil que mantuvo su antecesor, Thomas Shannon, en temas conflictivos como Venezuela y Cuba. No hay una política; hay improvisación, contradicciones. ¿Han tenido iniciativas? Si las hay, son secretos de Estado, indicó Jaime Daremblum, del Instituto Hudson. No es que no...

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