Santiago la tierra que nace de la poesía

En la oda La Araucana se concibió a Chile como la fértil provincia, respetada por fuerte, principal y poderosa. Alonso de Ercilla su autor atinó 500 años antes las virtudes que goza hoy esta estrecha tierra de gran longura. Su corazón palpitante reposa en Santiago, la capital, que presume las cualidades inequívocas enunciadas por el poeta: es fuerte, por ser la tercera ciudad más competitiva en Suramérica; principal, por ofrecer mayor calidad de vida; y poderosa, por considerarse la segunda mejor para hacer negocios. Además, resguarda rincones pintorescos y memorables que la posicionan entre las metrópolis más agraciadas en el sur del continente.En sus calles no prevalece el carácter colonial que pudiera pensarse, sólo siete edificaciones de época se encuentran en pie. De resto, la modernidad parece haber tocado la puerta de los santiaguinos con rascacielos de vista panorámica que abruman por la idea de que un repentino sismo haga mella en las imponentes construcciones de cristal. Aunque la arquitectura está preparada para afrontar movimientos telúricos, a los foráneos siempre les queda un dejo de ansiedad. Pero, por temor no resista la oportunidad de recorrerla. Si cuenta con un día, planifique un corto y sustancioso itinerario.Por la mañana. El tráfico pe sado a las 8:00 am lo obligará a comenzar la jornada bien temprano, pero como Santiago se recorre a pie no representará mayor inconveniente.Para descubrir la cotidianidad de la urbe empiece por el centro, desde la estación de Metro La Moneda. Entre las avenidas Bernardo O’Higgins y la Principal de Santiago está el Palacio de La Moneda que, aunque hoy funge como sede del Gobierno, todavía conserva las huellas de los disparos golpistas en 1973 cuando pereció Salvador Allende.Está rodeado de dos plazas, La Constitución, donde puede apreciar exposiciones itinerantes o fotografiar las esta tuas de algunos presidentes y, La Ciudadanía, en la que puede instruirse en el Museo Palacio de la Moneda. A un costado queda la Intendencia de Santiago, un edificio antiguo que vale la pena fotografiar, aunque no sea de los principales monumentos para visitar en profundidad.Si agiliza el paso hacia el es te podrá divisar la sede de la Bolsa de Comercio. En ese espacio hay dos calles pequeñas con edificaciones antiguas. El ambiente es fascinante si acude en un día laboral, pues se sentirá en medio de cualquier calle concurrida de Nueva York en hora pico, posiblemente sea esa la razón por la cual bautizaron...

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