Simón Díaz revive en ritmos bailables

El mal de Alzheimer condicionó la última etapa de la vida de Simón Díaz. En ese entonces, la gente que lo visitaba le cantaba sus temas.No te aseguro que mi papá se acuerde de ti, le advirtió Bettsimar Díaz a Rafael el Pollo Brito antes de hacerlo pasar a su habitación.Cuando el músico comenzó a corear Mercedes, el compositor miró sorprendido a su hija y le dijo: Este muchacho es bueno. Ella recuerda la anécdota durante la presentación del disco Pa’ Tío Simón , un homenaje al maestro de la tonada venezolana.Brito es el encargado de rein terpretar varios de los temas clásicos de Simón Díaz que están grabados en el imaginario colectivo, pero con un toque distinto. 90% de la producción se presenta con ritmos diferentes, bailables, para escuchar y pensar en la versatilidad de la obra del Tío Simón, dice el cuatrista.El becerrito, por ejemplo, es una gaita de tambora en esta producción; Mi caballito se interpreta como una contradanza, Corral de ordeño se escuchará como un blues, Luna de Margarita es un bolero; El bucerrito una quichimba, Presénteme esa muchacha un calipso y ¿Qué vale más? un pasaje. El álbum de 14 canciones también incluye El negro y el catire, Tonada de las espigas, Por Elba, Despedida, El superbloque,¡Qué va, mi amor! y Caballo viejo.Brito considera que con este último tema quiso ser más cuidadoso. A pesar de que se han hecho miles de versiones de `Caballo viejo’, es muy difícil.Decidimos hacerla con un formato más...

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