El teatro sigue estando en la acera de enfrente

Una vez que se sube el telón, ya no hay marcha atrás. El teatro es como un salto al vacío, afirma Iván Tamayo, al tiempo que revive esa adrenalina que le hace pensar que es casi un logro deportivo. En el único sitio donde el actor es realmente dueño de lo que hace es en el teatro, un hecho único e irrepetible porque ninguna función es igual a otra y todas las veces ocurre como si fuera la primera vez, asegura este intérprete, que igual hoy se sube a las tablas y mañana aparece en la pantalla, ya sea del cine o la televisión, con esa mirada tan suya capaz de atravesar espacios. ÂLuigi Sciamanna ha dicho que el teatro venezolano no está a la altura de las circunstancias. ¿Cuál es su visión? ÂNo sé si estamos haciendo cosas realmente trascendentes e importantes; son pocas. Pero el teatro que me gusta y el que comparte Luigi, un actor por el que siento una profunda admiración, sigue estando donde siempre ha estado, que es en la acera de enfrente porque nunca hemos sido complacientes con ningún gobierno. ¿Por qué escasean los gran des montajes, mientras abundan los monólogos y géneros escénicos como el stand-up comedy? ¿Es un asunto me ramente económico o reflejo de lo que quieren los espectadores? ÂHay una escasez de salas para tanta gente abocada a la actividad teatral y eso hace que en una sala se presenten hasta tres espectáculos un día, lo que impide grandes escenografías. Como la actividad televisiva fue golpeada duramente con el cierre de RCTV, muchos actores que antes no tenían ese interés por el teatro ahora lo están en procura de ganarse el pan. Muchos de los espectáculos, sin menospreciarlos porque están en su derecho, están dirigidos a la risa fácil. Somos un pueblo alegre, pero ¿hay tanta necesidad de ver y hablar sobre el sexo, la pareja...? No lo sé. La gente de teatro debiera revisarse y pensar si es realmente lo que los espectadores quieren o lo más fácil de hacer. ÂPetroleros suicidas, pieza de Ibsen Martínez en la que recién participó, culminaba con una pregunta abierta: ¿Qué tiene el petróleo que envenena tanto?. ¿Cree en el teatro como espejo de la sociedad? ÂEl teatro es un gran espejo, un espacio para reflexionar sobre lo que somos como seres humanos y, en el caso de Pe troleros suicidas , como país, por esa avidez por el guiso. Los venezolanos debemos cuestionarnos por qué somos así. Pero que haya un planteamiento de la razón, un cuestionamiento, no hace que sea menos entretenido; de hecho, se me hace mucho más...

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