Debate sobre el techo de la deuda revela fallas del sistema político en Washington

La posibilidad de una caída en impago de sus obligaciones encendió las alarmas en Estados Unidos. Las dificultades para acordar el aumento del límite del endeudamiento del Estado revelan las brechas que hay entre demócratas y republicanos. Más que el incumplimiento con sus acreencias externas o que el Gobierno federal deje de honrar sus compromisos con las oficinas gubernamentales que dependen de él, han quedado a la vista las fallas del sistema político. Michael Bailey, profesor de políticas y gobierno de la Universidad de Georgetown, afirmó que el Partido Republicano usó el debate como una oportunidad para presionar al gobierno. Se lo han hecho a los demócratas y viceversa; es para lograr ciertas presiones y después alcanzar acuerdos, aseveró. La sangre fría y el tiempo se acaban porque la decisión se debe tomar para el 2 de agosto, fecha tope para aumentar el límite del endeudamiento. Anteriormente, los legisladores pospusieron en dos ocasiones, el 30 de marzo y el 8 de julio, elevar el techo de la deuda. Uri Dadush, director del pro grama de Economía del Carnegie Endowment, señaló que todas las personas con poder de decisión son conscientes de los riesgos y problemas que generaría el impago. Estoy seguro de que las partes lo quieren evitar y buscan un acuer do. Saben que si no negocian vendrán tiempos difíciles, agregó. Bob Chapman, analista económico y corredor de bolsa por más de 29 años, señaló que aunque históricamente Estados Unidos nunca ha incurrido en un cese de pagos, es posible que ahora sí lo haga, lo que implicaría que el Gobierno federal dejaría de honrar sus obligaciones en programas de salud y educación o los sueldos a sus funcionarios, incluidas las Fuerzas Armadas. ¿Qué lleva a la economía es tadounidense a esto? El Gobierno tiene un problema de gasto acelerado que lo llevó a tener egresos por 867 millardos de dólares adicionales a los 2,5 trillones establecidos en el presupuesto de este año, lo que causa un déficit en torno a un trillón más, que se ha acumulado por eventos extraordinarios como la caída de los mercados, el plan de estímulo para evitar la recesión y el pago de las guerras en Afganistán e Irak. Cuando combinas ese gasto adicional se hace comprensible que el Ejecutivo tenga que pedir más dinero del pensado y subir el techo de la deuda, que es un monto establecido para lo que el gobierno debe usar o gastar, dijo Stephan Halper académico de Cambridge y ex asesor presidencial de George Bush y Bill Clinton...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR