Los temas otros en el arte este

Esta aproximación a la muestra Once tipos del 11 pone de relieve la creciente inclusión de motivos extra artísticos en el arte contemporáneo. Elías Crespin coordina su TriNet desde su pequeña computadora. La cibernética entra en esta obra, que toma préstamos de la robótica, la kinesis y las artes de la temporalidad. Puntos y líneas nacieron de su pasión matemática y liberaron luego coreografías danzantes. Queda en el espectador la alegría sensorial del movimiento, pero también una reflexión más serena sobre los equilibrios en la materia: concentración y expansión, levedad o peso, presencia o desaparición. La naturaleza es revisitada: la sideral, por aquellas órbitas de Crespin, como si fueran trazadas por cuerpos celestes; la de la geografía nacional en las imágenes de Miguel Amat, quien en Represas y préstamos hace ver relaciones entre sitios naturales e intervenciones humanas que toman el territorio. Otras naturalezas conviven en Ani males sintéticos, de Juan Re quena, obra que alude al ser vivo y, a la vez, a sus derivaciones objetuales; a animales reales en proceso de extinción y a pequeños seres de baquelita; a referentes científicos y a imaginarios infantiles tomados de las jugueterías. Juan José Olavarría trabaja los símbolos de nuestra historia política en paralelo a la historia cultural. Hace de la bandera --degradada, decolorada, neutralizada, estirada como cama elástica-una Per formance instalada: emblema y anti emblema del ser nacional. Las visiones históricas, éticas y políticas colaboran aquí, desde fuera del arte, a instau rar poéticas. Ángela Bonadies, en Copia original, hace foco en sus libros de referencia, en extensión de su previa indagación sobre archivos, pero en un giro esta vez hacia la fotografía como autoseguimiento. Annella Armas frota la imagen, superpone matrices, trae a sus grabados los recursos de la industria gráfica --sellos, logos, troqueles. La mueve la riqueza visual de lo impreso --el brillo, la trama-pero también revaloriza el desecho, lo deleznable. En su videoinstalación El ojo de la clarividencia Nayarí Cas tillo explora otras dimensiones al narrar el traspaso generacional de un amuleto de premoniciones. Lo real, lo invocado y lo inventado intercambian sus temples. Un ojo de vidrio es talismán y crisol de visiones: ejerce la atracción de lo esférico, se hace emisario de la mirada. Los sonidos penetraron hace mucho en los santuarios de lo visual. Con El Patrick Miller de Suwon Lee la música popular...

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