Trabajos en la Diego Ibarra no pudieron culminar a tiempo

Ni el fuerte sol del mediodía de ayer impidió que se detuvieran los trabajos en la recuperada plaza Diego Ibarra. Entre las nubes de polvo que se levantaban con el paso de los camiones, decenas de obreros de la Alcaldía de Libertador apuraban los últimos toques para terminar la refacción de este espacio público. Su entrega estaba prevista para el 5 de julio, por la celebración del bicentenario de la Independencia. Sin embargo, faltaban algunos detalles por pulir. El cemento fresco lucía las huellas de algunas pisadas y delataba que había sido vertido hacía muy poco tiempo. Daniel Aguirre, coordina dor de eventos de la Alcaldía de Libertador, declaró que los obreros trabajaron día y noche en las obras para cumplir con el plazo de entrega. Aquí todo el mundo está amanecido, enfatizó. Durante la reinauguración tendría lugar el concierto del director Gustavo Dudamel junto a la Orquesta Sinfónica Venezuela, cuya hora de inicio se fijó para las 6:00 pm. La plaza estaba preparada para recibir a 5.000 personas y para el espectáculo se preparó un juego de luces, además del encendido de la fuente oval. Así, entre las miles de sillas dispuestas para el público y una imponente tarima, la gran explanada que es ahora la plaza Diego Ibarra lucía regia, pero con ciertos detalles que indicaban la premura con la que todo fue hecho. Cintas amarillas alertaban que no podían pisarse aún algunas placas de cemento; los reflectores que rodeaban la fuente estaban cubiertos y el agua usada en la limpieza de los alrededores corría por el suelo. Aguirre asegu ró que los trabajos se llevarían más tiempo y que la alcaldía no los abandonaría. Con tropiezos. Las...

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