US$ 35 millones pagó el gobierno

Ningún operador político tuvo tanto éxito en la última década. Desde 2006, João Santana ganó ocho elecciones presidenciales en cinco países. Además de prestigio y millones de dólares, el trabajo del publicista brasileño le aportó el apodo de constructor de presidentes en la prensa latinoamericana.Pero el consultor no pudo celebrar su última victoria.Cuando uno de sus clientes, Danilo Medina, fue reelecto en República Dominicana con 61,8% de los votos en mayo, Santana ya estaba preso hacía casi tres meses en la cárcel de la Policía Federal en Curitiba por la operación Lava-Jato. En todos esos países, la prisión de Santana levantó fuertes sospechas sobre su forma de trabajo. Está acusado de corrupción, la vado de dinero y ser parte de una organización delictiva en Brasil. Parte de los sobornos que habrían sido pagados al PT eran desviados, según la investigación, al publicista y a su mujer, Monica Moura, responsables de las campañas de Lula en 2006 y de Rousseff en 2010 y 2014. El matrimonio afirma que no sabía que el dinero era producto de corrupción. Los investigadores sospechan que Santana también podría haber recibido dinero por campañas en el exterior.Con el trasfondo de las victorias de Dilma y Lula, Santana se lanzó hacia América Latina y África en apoyo de políticos de izquierda. Si hasta 2007 la experiencia internacional de su agencia, Polis, era apenas en campañas legislativas y...

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