Vaginas sagradas, no eróticas

Si hay una imagen que define la trayectoria de Carlos EnríquezGonzález en el mundo del arte es la del célebre artista conceptual y coleccionista Jeff Koons levantando la paleta en una subasta de Phillips de Pury, para pujar por una de las esculturas del venezolano.

El creador expone regularmente en Estados Unidos, Europa y Asia, es uno de los caballitos de batalla de la citada casa londinense e inclusive donó obras a organizaciones benéficas que se encargaron de recoger fondos para las víctimas del terremoto y tsunami que sacudieron recientemente Japón, el país donde trabaja. Sin embargo, no había tenido una gran individual en Caracas. ¿La razón? Pocas galerías de la capital se pueden dar el lujo de desplegar vaginas de 2,40 y 2,60 metros de altura en sus salas.

Bien sea por problemas de espacio o por pacatería, el artista Ârecordado por sus esculturas de Astroboy exhibidas en los museos nacionales no había expuesto en el país el trabajo que desarrolla desde 2003. Pero la situación cambió el viernes, cuando inauguró la muestra Epifanía en la galería GBG Arts, con textos y curaduría de Steven Agin, consultor de Phillips de Pury y Company.

Las "vaginas mutantes", con ojos, dientes metálicos y piernas, son fieles a la estética del action figure. Se exhiben sobre pedestales o directamente sobre una alfombra de grama artificial. Además de las esculturas, se muestran los moldes con los que fueron hechas. "La vagina más grande que he creado mide 3,60 metros de altura y está en Estados Unidos. Me gusta trabajar a gran escala, así la obra causa un mayor impacto y logra algo que me parece muy importante: mover las emociones de la gente. Hay personas que de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR