Vinos y postres en Navidad

Al final del almuerzo o de la cena nos encanta saborear y deleitarnos con ricos dulces y postres; especialmente en Navidad, cuando son tan típicos y exquisitos, que nuestra felicidad vence las restricciones del resto del año. La armonía entre vinos y postres es deliciosa, aunque difícil de lograr; se debe tomar en cuenta la intensidad del sabor del postre para respetar los equilibrios con el vino. El fuerte sabor dulce de los postres tiende a chocar con los vinos secos y tánicos, por lo que se prefieren los dulces para mantener una perfecta fusión entre ambos; sin embargo, como los maridajes son libres, podemos usar un vino seco, como un Brut Nature, para apreciar el sabor del postre sin agregarle más dulce. El dulzor del vino no debe opacar el sabor y textura del postre, sino más bien exaltarlo; es muy deseable que los vinos tengan alta acidez, la cual aporta sensación de frescura en la fusión. Lo ideal es acompañar los postres, con vinos dulces licorosos, frizzantes y espumosos en todos sus tipos.En Navidad no puede faltar la riquísima torta negra, postre de mucha textura; se puede maridar con un tinto...

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