Vinotinto a la carta

Los primeros días de competencia de los XVI Juegos Panamericanos, que se disputan desde el pasado sábado en Guadalajara han ofrecido algunos contrastes. A la espectacularidad de una ceremonia inaugural, en la que se llegó a mostrar lo mejor de la cultura azteca, ha seguido otra cara en los aspectos operativos. Los organizadores de estas justas han mostrado poco conocimiento de cómo tratar ciertas situaciones, especialmente las relacionadas con el trabajo de la prensa. Falta de comunicación, desorden, desconocimiento de las necesidades para el trabajo del reportero e innumerables problemas con la conexión a Internet y el sistema de transporte, además de otras fallas logísticas, han sido elementos diarios con los que han tenido que lidiar los organizadores, que no han dejado de manifestar su descontento pese a la amabilidad de los voluntarios, que al igual que en otras competiciones han estado al frente del trabajo de logística. No es esa la única mancha de la organización de estos Juegos. Apenas horas antes de que las competencias dieran inicio, después de que de solventar las amenazas de retraso por el clima, las instalaciones que albergan al tenis de mesa, la gimnasia y el atletismo no estaban terminadas. Los 1.960 días que siguieron a la adjudicación de la...

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