Edmée Betancourt, la ministra china convertida en presidente del BCV

Por segunda vez una mujer ocupa la presidencia del Banco Central de Venezuela. En 1992, le correspondió a Ruth de Krivoy, que por su trayectoria en el mundo financiero nacional y foráneo se convirtió en una referencia de credibilidad para analistas financieros internacionales al punto de que cuando renunció en abril de 1994, por diferencias con el gobierno del presidente Rafael Caldera, marcó una debacle económica con mayor repercusión en el exterior que la crisis financiera que se vivía en esos años.Ahora el turno es para la va lenciana Edmée Betancourt, ingeniero industrial de profesión, que por primera vez pasa a ser referencia de las bancas de inversión como Barclays Capital, Credit Suisse o Bank of America, pero no por su trayectoria sino porque es considerada una designación que lejos de atraer inversionistas los ahuyenta.Diferentes razones tienen las entidades bancarias contra la funcionaria: aseguran que forma parte de la corriente ideológica reticente al sector privado que encabeza el ministro de Planificación, Jorge Giordani; es señalada de haber manejado con poca transparencia el Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela y de no mostrar con claridad el peso que tienen los préstamos otorgados por China en las cuentas del Bandes, y cómo ha utilizado ese financiamiento.El presidente Hugo Chávez la llegó a bautizar como la ministra china porque estuvo al frente del equipo negociador de los préstamos aprobados por la nación asiática y fueron frecuentes sus viajes a Pekín, en ocasiones acompañada de sus familiares en aviones del Gobierno o con reservaciones en primera clase en la aerolínea Air France.Betancourt, siguiendo el cri terio de Giordani, niega que los créditos aportados por el Banco de Desarrollo de China, que se pagan con el suministro de crudo y combustibles por parte de Petróleos de Venezuela, deban contabilizarse como parte de la deuda pública externa.No podemos entender los argumentos que aseguran que nos vamos a endeudar y a hipotecar con China, si todo lo estamos invirtiendo y cancelando en beneficio de nuestro pueblo. No entiendo por qué dicen que estamos endeudándonos, eso es falso, declaró Betancourt en respuesta a las advertencias hechas por economistas y dirigentes de oposición que alertan sobre un saldo en el...

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